Del Perú para el universo. Los alimentos del futuro están aquí

Carmen de La Torre

A la Sociedad Peruana de Gastronomía (Apega) que promueve la feria agropecuaria
de los días domingos, en la cuadra 32 de la avenida Brasil en Magdalena del Mar

Vuelvo después de una ausencia de treinta años lejos de mi país, quince años en Venezuela, donde me inspiró la gastronomía y la admiración de los extranjeros del paraíso terrenal que es Perú, en toda la biodiversidad de sus tesoros andinos, de selva y mar, con celebridades que se deleitaban con los platos de nuestra cocina peruana. 

Esa admiración grandiosa me inspiró a tomar cursos de cocina en España, Francia y Nueva York; y cuando vacacionaba en mi país, Perú, tomaba cursos de hotelería. Luego trabajé en pastelería francesa como administradora, también como la única chef mujer en el Banco Central de Venezuela responsable de gestionar 1,200 raciones de comidas diarias, ofreciendo servicios de catering a las distintas embajadas, en la época del auge económico de ese país. Fundé en el Balneario de Playa El Agua (isla de Margarita en Porlamar, Venezuela), el restaurant ‘La Tortuga de Michael’, luego ‘El Pacífico’ para el turismo internacional. Para un chef hablar inglés, francés, japonés e italiano es algo que se logra en el mundo de la cocina internacional y la alimentación.

Emigré a EE. UU porque Venezuela cambio su economía, empecé en Nueva York trabajando en Delis, Sushi Bar, Juice Bar. Tomé escuela en gastronomía consiguiendo destrezas en cocina con las distintas tendencias y culturas como la Kosher, vegana, dieta ayurvédica, cocina griega, mediterránea y asiática. Trabaje durante quince años con los chefs más prestigiosos de la ‘gran manzana’ asistiendo a eventos que exigían etiqueta y protocolo. 

Por diez años he trabajado como Chef cocinera para un armador griego y su esposa, médico dermatóloga, quien me apoyó instruyéndome y capacitándome para conocer los ingredientes del mundo. A ella, como investigadora y autora de libros de nutrición de impacto internacional, le estoy muy agradecida, dando gracias a Dios por haber trabajado para esa familia. Esta dama me enseñó la alimentación con nuestro ‘arroz Inca’, como ella llama a nuestra quinua. Me ha instruido en la dieta vegana utilizando los tesoros andinos, frutas, vegetales, cereales, aceites (sacha inchi) e ingredientes como maca y kiwicha. Ella es una fanática de nuestros productos.

También trabajé con la presidenta del Departamento Filantrópico de la universidad de Nueva York, amante de la buena mesa, mis agradecimientos con fervor a esta persona que me enseñó la organización y la búsqueda de perfección. He asistido a familias de diferentes nacionalidades y costumbres en Nueva York, 5ta avenida, Central Park y Park Avenue

De igual forma soy una asidua investigadora y escritora, he viajado con mis empleadores a las Islas del Caribe, Bahamas, Aruba, Saint Marteen, isla privada en Grecia, los Alpes Suizos, las montañas de Aspen y del Canadá.  Allá en los distintos nevados aprendí a valorar y a apreciar nuestro paraíso terrenal andino, todos los tesoros que poseemos, escuchando las alabanzas a nuestra biodiversidad dichas por personas de distintos países.

He aprendido a amar a nuestros agricultores peruanos, quienes son los responsables de todo lo que poseemos tanto en la costa, sierra y selva. Al mismo tiempo, a los pescadores, por nuestras riquezas marinas. Quiero decirles a mis compatriotas que con mi empleador, el armador griego, aprendí a cocinar recetas con el 'pececito de oro' como él llama a la anchoveta. No conocemos la mayoría de peruanos los beneficios que posee este alimento, proteínas, vitaminas y omegas, y por eso tendremos que aprender a alimentarnos mejor.

Quiero agradecer a la organización gastronómica APEGA por ofrecer domingo a domingo una feria agropecuaria apoyando a los agricultores de las diferentes regiones, para estimular a todos aquellos que se dedican al agro a desarrollar competencias y habilidades para mejorar nuestros ingredientes emblemáticos. APEGA ofrece este lugar muy especial donde todos los visitantes que asisten domingo a domingo celebran nuestra identidad, con todo su colorido y variedad de nuestros tesoros alimenticios, de nuestras tradiciones. No olvidemos que ‘el estómago es la oficina donde se fragua la salud y la vida’.

Todos los peruanos tenemos buen estómago pero debemos aprender a desarrollar buenos hábitos alimenticios -decir no a la comida ‘chatarra’- para así obtener una mejor calidad de vida, con salud, que nos proporcionaría siempre energía pacífica y amorosa, no solo a nuestros cuerpos sino sobre todo a nuestro espíritu, así decía Pitágoras. APEGA tiene la misión de llevar enseñanza y orientación para aprovechar de nuestra abundancia.

Queremos un Perú sin hambre, sin enfermedades, sin desnutrición. Me gustaría y deseo que se implementen otras ferias agropecuarias en la ciudad de Lima y en el interior del país, donde la niñez y generaciones futuras reciban educación para tener una gran alimentación.

En la feria tengo la oportunidad de intercambiar ideas, he tenido tal receptividad con los agricultores, ellos me enseñan a conocer más los diferentes productos a partir de las frutas, cereales, tubérculos. Las incontables variedades de papas nativas, aceitunas, aceites, cafés, quesos, lácteos, yogurt, quinua y otros granos andinos.

Les digo sinceramente que visitar la feria agropecuaria de APEGA es un gran deleite para mí, un encuentro fabuloso y la sorpresa ha impulsado a mi creatividad a fusionar nuevas exquisiteces ‘novo-andinas’, fusionando las comidas internacionales con nuestros productos biodiversos, tanto que he creado nuevas recetas, encuentro ingredientes novedosos. Mi mensaje para los legisladores y poder ejecutivo: pedir más apoyo para los agricultores, ellos no pueden estar solos, la falta de inversiones y proyectos innovadores y la tecnificación del riego para producir más en el campo. A estas personas que son responsables de alimentarnos, no solamente a los peruanos sino también a la humanidad, darles estímulos para mantenerlos saludables pues ellos trabajan de sol a sol.

Yo quiero invitar a todos a visitar esta feria, gracias APEGA por promocionar nuestras tradiciones arraigadas para ser unos triunfadores.

Carmen de La Torre
Chef Internacional
Lima 2014

Nota del editor de HF. Damos la bienvenida a la señora Carmen de La Torre, chef e investigadora de la cocina andina, infaltable visitante de la Feria Agropecuaria Mistura (inaugurada en mayo de 2013), quien además tuvo un stand en los inicios de la feria, donde preparaba exquisitos platos con ingredientes de la biodiversidad nativa ofrecidos en este recinto, y que se vendían al costo, con el propósito de difundir la alimentación saludable. El presente artículo fue escrito a pedido nuestro y gracias a su gentileza hoy podemos leer una breve semblanza de su vida y reflexiones. Los subrayados son de HF.

(...) Hace dos años, aproximadamente en agosto de 2019, saludamos a la señora Carmen en la Agro Feria Campesina -en ese entonces en la cuadra 32 de la avenida Brasil, distrito de Magdalena del Mar (Lima). Nos entregó su flamante recetario ‘La papa, el tesoro andino del mundo’ y comentó que trabajaba un libro con sus experiencias como chef con los productos de la biodiversidad peruana.  Pocos días después nos mudamos a Piura y hasta ahora le perdimos el rastro a la señora Carmen. Quienes la estimamos la echamos de menos.

Haciendo Futuros
www.haciendofuturos.blogspot.com
Piura, Octubre 24, 2021

 

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