Sierra de Piura, una esperanza


Luis Ginocchio Balcázar

                                                 Dedicado a Bruno Revesz, SJ (+),
visionario del desarrollo regional de Piura

Piura tiene una sierra sumamente interesante pero cuya articulación viene tardando décadas. Si bien desde fines del siglo pasado se nota el ímpetu de jóvenes altopiuranos que hoy ostentan muy destacado liderazgo en los negocios y la política regionales, aun la sierra piurana mantiene una situación de rezago que es imperativo remediar.

Una de las buenas noticias para el desarrollo de Piura es la carretera de la capital regional a la ciudad de Canchaque la cual ha permitido que productos y servicios de la sierra mejoren su acceso a la costa. Es aquí donde hay que mencionar la alianza de los distritos de Buenos Aires, Salitral y San Juan de Bigote en Morropón; asimismo, de San Miguel de El Faique, Canchaque y Lalaquiz en Huancabamba para conformar la mancomunidad del Alto Piura organizada como un corredor económico con una visión clara y entusiasmo, que el CIPCA apoya con la publicación ‘Estudio de Potencialidades Económico - Productivas y Retos del Corredor Alto Piura’, sobre la que propongo los siguientes comentarios:

1) Sobre la asociatividad, realmente ésta permitió el éxito de café, cacao y banano orgánico, ¿o fue una exigencia o resultado de la demanda del mercado exterior?  [‘la mayor parte de sistemas productivos son sumamente tradicionales y desligados de los intentos asociativos que sí han permitido el despegue de aquellos orientados a mercados competitivos’].

2) Las oportunidades que traerá el PEIHAP, ¿podrán ser aprovechadas por los altopiuranos sin organización de los productores, preparación gerencial de los líderes y mirada diversificadora? Y ojo, que la articulación con los mercados nacionales sigue siendo débil y poco ventajosa.   [‘Igualmente, preocupa la nula prospección que se tiene en el sector en general frente a un proceso transformador como el PEIHAP, por lo que la reconversión agropecuaria con soporte asociativo es uno de los procesos clave bajo este orden de consideraciones].

3) Si bien ya se ha escrito sobre la obsolescencia del sistema nacional de distribución de alimentos, no cabe duda que es urgente una diversificación de cultivos, crianzas y derivados agroalimentarios. Esto que es tan evidente para la costa lo es también para la sierra de Piura. Por ejemplo, con el auge del cacao de alto aroma, se impone la elaboración de chocolates, actividad que hasta ahora está mayoritariamente en la iniciativa de negocios no asociativos (o sea de personas o empresas). Otra vez el punto anterior, hace falta preparar a los líderes en materia en agregación de valor vía el procesamiento y el marketing. Los quesos madurados de alta calidad son un espacio comercial interesante.

4) El potencial turístico es importante, aunque coincido con los autores que es algo a mediano plazo. Piura, Sullana, Talara y otras son ciudades que han vivido de espaldas a su sierra. Y que podrían generar flujos de turismo hacia las ciudades de la mancomunidad que tengan propuestas de valor –alojamiento, restauración, entretenimiento, deportes y naturaleza- para ellos. Lograr que la sierra piurana se convierta en sede de desarrollos turísticos es un reto de la mayor prioridad. Piura tiene una sierra verde y cercana como la región La Libertad tiene a la provincia y ciudad de Otuzco con su guardiana, la Virgen de la Puerta, Madre de la Misericordia y de la Esperanza.

Los procesos propuestos en el documento recogen desafíos cuyas tareas de solución siguen vigentes desde hace muchos años: a) reconversión productiva agropecuaria, b) consolidación y ampliación de los modelos de asociatividad empresarial, c) promoción de la agroindustria rural y, d) del turismo sostenible.

La reflexión final es sobre cómo se van a coordinar los esfuerzos para hacer realidad las potencialidades elaboradas por el estudio del CIPCA. Idealmente, una alianza de la mancomunidad con una entidad privada incluyendo inversionistas hoteleros, especialistas en desarrollo territorial y de negocios, una universidad y la cooperación técnica internacional. El Estado siempre es importante que esté presente en especial porque para construir competitividad local se requieren recursos frescos para establecer –por ejemplo- un fondo de innovación para las iniciativas diversificadoras en los seis distritos y la incorporación de conocimiento nuevo o disponible para abordar los retos productivos, comerciales y ambientales.

Documento completo a descargar desde la web del Centro de Investigación y Promoción del Campesinado (CIPCA)



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