Michael Reid y ‘El continente olvidado’


El pasado martes 29 de enero en la librería El Virrey de plaza Bolognesi (Miraflores, Lima) se presentó el libro ‘El continente olvidado: la lucha por el alma de América Latina’ (Planeta 2018), del escritor y analista británico Michael Reid. El polítólogo Alberto Vergara formuló los primeros comentarios sobre el libro ante un nutrido número de atentos asistentes que colmaron las instalaciones de este tradicional espacio donde evocamos el talento y enérgica personalidad de la inolvidable ‘Chachi’ Sanseviero (1945-2018), animadora cultural y librera.

Para comenzar, Vergara destacó que Reid pasa de mirar América Latina con el tradicional enfoque de los estados-nación a pensar América Latina como una unidad. En seguida, -resalta el también profesor universitario-, el libro se ocupa de la agenda ‘grande’ del desarrollo como un todo a conseguir, acercándose a los problemas de si el Estado o el mercado, a si se necesita o no la universidad, de si la sociedad civil aprende a auto gobernarse.

Un tercer elemento que Vergara relieva en el libro de Reid es la forma. Una pluma agradable y elegante, estética pero a la vez rigurosa. Un escritor con un oído en la academia y el otro en los informes de las entidades especializadas. Miradas que en más de treinta años le permitieron conocer la región como pocos.

Michael Reid, quien recordó a su esposa peruana y sus doce años de vecino de Lima, precisó que la primera edición del libro -en inglés- fue en 2007 y luego se publica en español con la editorial Norma pero sin mucho éxito pues en esos tiempos Norma cesó operaciones. La edición de Planeta va más allá de ambas -en inglés y castellano- pues se extiende hasta cubrir los años del auge y caída de los precios de los commodities.

Comparando con 1980 -cuando visita América Latina por vez primera- con el momento de escribir el libro, Reid afirma que se tienen sociedades más democráticas, menos oligárquicas y menos pobres. Pero en la perspectiva de la democracia y el desarrollo de los recientes diez años, el escritor expresó que el panorama es menos amistoso para cambios en ambos temas. Dejó claro que hay retrocesos en las democracias de Venezuela y Nicaragua. Y dos incógnitas en Brasil y México.

Sobre la clase media Reid destacó algunos de sus rasgos distintivos, nivel de ingresos, educación, visión de la vida y que no gusta del ‘aventurismo’. Sobre Brasil refirió que esa república había adoptado una política económica como la peruana pero -siempre según Reid- la señora Dillma intervino en la misma y dejó sin instrumentos de política a su país. Sin embargo, también criticó que Lula realizara grandes subsidios a empresas y ese ‘capitalismo de compadres’ ayudó a la debacle.

Para Reid si bien diez años de auge del precio de las materias primas generaron crecimiento -que trajo cambios-, todavía el desafío de la productividad implica una agenda muy grande. Hay muchas tareas pendientes para los empresarios sobre todo en nuevas capacidades y planificación. Por otra parte, Vergara afirmó que el libro no es pesimista pues resalta las fuerzas a favor de cada uno de los dos lados del espectro político y económico, tradicionistas versus modernizadores.

Sobre la integración mencionó los desencuentros en el Mercosur, Alba, OEA y la Comunidad Andina pues para Reid no es fácil ceder soberanía. Además, la distancia influye: el tramo entre la ciudad de Tijuana y Tierra del Fuego es mucho mayor que la lejanía entre las Islas del Norte del Reino Unido y el extremo más austral de Sudáfrica. Sugirió seguir fortaleciendo el comercio y construir más infraestructura para ir acercando a los países de esta parte del mundo.

Reid se considera un liberal, no un libertario. Los libertarios piden un Estado mínimo, que no se meta en nada y asi las cosas las élites se vuelven ‘gamonales’. El desarrollo no vendrá con racismo, será con sociedades con igualdad de oportunidades y libres. América Latina es la tercera gran región democrática del mundo. Y el desarrollo viene trayendo mayores necesidades de alimentos, agua y materias primas, tareas en las que América Latina tiene ventajas. Considera difícil que América Latina pueda implementar una industria grande debido a la competencia de China. Y que la salida va por añadir valor a los recursos naturales. Cerró sus reflexiones diciendo que mientras se celebraba la instalación de nuevas fábricas en el hemisferio norte, en América Latina se festejaba la apertura de nuevos mall. Dicho de otro modo, la industria detrás del comercio.

Interesante publicación en especial porque la escribe un profundo conocedor de la realidad y potencial, querencias y mitos del territorio y de los latinoamericanos. Y que convierten a este libro en lectura imprescindible para quienes estamos preocupados por el progreso económico y el avance social de las Américas. Conociendo mejor esta gran región podremos buscar los equilibrios para hacer viable este extraordinario espacio de opciones productivas y grandes retos políticos, sociales y ambientales.

Lic. Luis Ginocchio Balcázar
Lima, Marzo 1, 2019

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